Durante los días 3, 4 y 5 de
Junio, el grupo local se desplazó hasta el Parque Nacional de Monfragüe para
rendir homenaje a uno de los espacios con mayor riqueza de Europa. Allí pasamos
un estupendo fin de semana alojados en los chozos del Parque Nacional y
participando en distintas actividades organizadas dentro del mismo.
Viernes 3
Los
miembros del grupo llegamos al parque el viernes por la tarde, y desde nuestra
llegada, numerosas aves como: golondrinas, aviones, abubillas o incluso
cogujadas, nos deleitaron continuamente con su vuelo a última hora de la tarde.
Fig. 1. Nido de golondrinas
dentro del P.N. de Monfragüe.
Tras esta primera toma de
contacto, el grupo decidió dar una vuelta nocturna por la zona para observar
parte de la riqueza que hay en este entorno. Para ello, tomamos nuestros
frontales y linternas y nos acercamos paseando hasta la ruta astronómica, donde
personal del Parque Nacional había organizado una jornada nocturna de
identificación de mariposas y otros coleópteros.
Fig. 2. Miembros del
grupo preparados para dar
una vuelta nocturna por la zona.
Fig. 3.
Miembros del grupo participando en el Taller de
identificación
de mariposas y otros coleópteros.
A nuestro regreso del taller,
pudimos escuchar de forma intermitente el canto de numerosos sapos y ranas
presentes en las pequeñas charcas y riachuelos de la zona, llegando en algunos
casos a obsérvalos mientras cruzaban de un lado a otro del camino.
Pero la última sorpresa del
primer día de jornada, la proporcionó sin duda un pequeño zorrito, el cual se
acercó sin temor a la zona de merendero cercana a nuestros chozos, para
alimentarse de los restos que los visitantes habían depositado en los
contenedores de basura.
Sábado 4
El segundo día de jornada comenzó
para los miembros del grupo en la Portilla del Tiétar, donde nos desplazamos
con el objetivo de ver a la mítica Águila imperial.
Esta zona del parque a pesar de
ser geológicamente bella por los plegamientos que tienen los materiales de
cuarcitas y pizarras que forman las paredes,
también es sin duda uno de los lugares más emblemáticos del parque para
la observación de la avifauna. Por ese motivo, a pesar de que no pudimos
observar al final al Águila imperial, sí que vimos numerosos ejemplares del Buitre
leonado, Alimoche, Milano negro y Cigüeña negra, entre otros.
Fig. 4. Imagen de la
Portilla del Tiétar.
Fig. 5. Miembros del
grupo intentando localizar
al Águila imperial.
Fig. 6. Otros miembros del
grupo observando el vuelo
de las aves frente a la
Portilla del Tíetar.
Fig. 7.
Ejemplares de Buitre leonado (Gyps fulvus)
ascendiendo
en las corrientes de aire.
Fig. 8.
Ejemplar de Alimoche común (Neophron
percnopterusposado) sobre una
roca.
A media mañana, tras esta pequeña jornada de
observación de aves, el grupo decidió participar en un segundo taller
programado por el personal del parque, el anillamiento divulgativo de
Paseriformes. Curruca carrasqueña, Pinzón, Picogordo, Martín pescador, Ruiseñor
bastardo… son sólo algunas de las especies que fueron capturadas en la red a lo
largo de la mañana.
Fig. 9. Miembros del
grupo participando en el
taller de anillamiento.
Fig.
10. Personal del parque tomando datos
de los
ejemplares durante el anillamiento.
Fig. 11. Personal del parque tomando datos
de los ejemplares durante el anillamiento.
Aprovechando también que los más
pequeños y no tan pequeños estaban entretenidos con el taller de anillamiento,
otros miembros del grupo dimos un pequeño paseo por la zona del Arrollo
Malvecino, donde algunos aventureros nos desviamos un poco del camino y
acabamos en el Mirador del Cerro Gimio.
Fig. 12.
Miembros del grupo descansando
en el
puente sobre el Arrollo Malvecino.
Fig. 13.
Vistas desde el Mirador del Cerro Gimio.
Durante la hora de comer, los miembros del grupo nos pasamos
por el centro de visitantes, donde aparece recogida una muestra visual de la
riqueza del parque y la información más esencial de que podemos ver y encontrar
en este entorno tan singular.
Por la tarde, el grupo visitó
otro lugar emblemático dentro del Parque, el Castillo de Monfragüe y la Ermita.
Desde allí hay unas hermosas vistas del parque natural y es relativamente fácil
observar algún ave si nos detenemos allí un instante. Además, es un lugar muy
bueno para observar los contrastes de las especies vegetales que podemos
encontrar en la zona de sol y de umbría.
Fig. 14.
Vistas desde el Castillo de Monfragüe.
Fig. 15.
Imagen de la Ermita y Castillo.
Fig. 16.
Vistas de la zona de solana.
Fig. 17.
Observación de aves desde el Castillo de Monfragüe.
Aprovechando ya las últimas horas
de luz del día, nos acercamos al Salto del Gitano (parada obligatoria para todos
los visitantes dentro del Parque Nacional). Aquí a parte del continuo trasiego
al que nos tienen acostumbrados los buitres con sus vuelos, pudimos ver como
algunos construían con ramas sus propios nidos o también a la singular cigüeña
negra cuidando de sus polluelos.
Fig. 18.
Ejemplar de Cigüeña negra (Ciconia nigra)
con sus crías.
Fig. 19.
Ejemplar de Buitre leonado construyendo su nido.
Por último, para finalizar este
magnífico día, los miembros del grupo decidimos observar el inmenso cielo
estrellado de Monfragüe. Para nuestra sorpresa, nuestro confiado amigo “el
pequeño zorro”, volvió a hacernos compañía una vez más, pudiéndole observar
casi pegado a nosotros. Además también apareció otro invitado especial, “el
jabalí”, que aunque no se dejó ver, sí que le pudimos escuchar muy cerca.
Fig. 20. Pequeño zorrito acercándose a curiosear.
Fig. 20. Pequeño zorrito.
Domingo 4
El domingo, los miembros del
grupo nos despedimos del personal del Parque, dándole las gracias por dejarnos
disfrutar de este maravilloso fin de semana en los chozos del parque.
Desde el grupo local SEO/BirdLife
Aranjuez, solo nos queda decir que nos hemos llevado un magnifico recuerdo de
esta gran jornada, y estamos deseando volver a repetir y compartir con vosotros,
algo igual.
3 comentarios:
Genial, me alegro por vosotros.Saludos.
Gracias Laura. Aclaremos que en la Fig. 20 el zorrito es el de la derecha. Jjjjj
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